jueves, 19 de abril de 2012

El árbol de la ciencia -Pío Baroja

El árbol de la ciencia de Pío Baroja

Quinta Parte Capítulo 5

Alcolea del Campo

Las costumbres de Alcolea eran españolas puras; es decir, de un absurdo completo.
El pueblo no tenía el menor sentido social; las familias se metían en sus casas, como los trogloditas en su cueva. No había solidaridad; nadie sabía ni podía utilizar la fuerza de la asociación. Los hombres iban al trabajo y a veces al casino. Las mujeres no salían más que los domingos a misa.
Por falta de instinto colectivo el pueblo se había arruinado.
En la época del tratado de los vinos con Francia, todo el mundo, sin consultarse los unos a los otros comenzó a cambiar el cultivo de sus campos, dejando el trigo y los cereales y poniendo viñedos, pronto el río de vino de Alcolea se convirtió en río de oro. En este momento de prosperidad, el pueblo se agrandó, se instaló la luz eléctrica...; luego vino la terminación del tratado, y como nadie sentía la responsabilidad de representar el pueblo, a nadie se le ocurrió decir: Cambiemos el cultivo; volvamos a nuestra vida antigua; empleemos la riqueza producida por el vino en transformar la tierra para las necesidades de hoy. Nada.
El pueblo aceptó la ruina con resignación.
Antes éramos ricos se dijo cada alcoleano. Ahora seremos pobres. Es igual; viviremos peor, suprimiremos nuestras necesidades.
Aquel estoicismo acabó de hundir al pueblo.
Era natural que así fuese; cada ciudadano de Alcolea se sentía tan separado del vecino como de un extranjero. No tenían una cultura común (no la tenían de ninguna clase); no participaban de admiraciones comunes: sólo el hábito, la rutina, les unía; en el fondo, todos eran extraños a todos.
Muchas veces a Hurtado le parecía Alcolea una ciudad en estado de sitio. El sitiador era la moral. La moral católica . Allí no había nada que no estuviera almacenado y recogido: las mujeres, en sus casas; el dinero, en las carpetas; el vino, en las tinajas.
Andrés se preguntaba: ¿Qué hacen estas mujeres? ¿En qué piensan? ¿Cómo pasan las horas de sus días? Difícil era averiguarlo.
Con aquel régimen de guardarlo todo, Alcolea gozaba de un orden admirable, sólo un cementerio bien cuidado podía sobrepasar tal perfección.
Esta perfección se conseguía haciendo que el más inepto fuera el que gobernara. La ley de selección en pueblos como aquél se cumplía al revés. El cedazo iba separando el grano de la paja, luego se recogía la paja y se desperdiciaba el grano.
Algún burlón hubiera dicho que este aprovechamiento de la paja entre españoles no era raro. Por aquella selección a la inversa, resultaba que los más aptos allí eran precisamente los más ineptos.
En Alcolea había pocos robos y delitos de sangre: en cierta época los habia habido entre jugadores y matones; la gente pobre no se movía, vivía en una pasividad lánguida; en cambio, los ricos se agitaban, y la usura iba sorbiendo toda la vida de la ciudad.
El labrador, de humilde pasar, que durante mucho tiempo tenía una casa con cuatro o cinco parejas de mulas, de pronto aparecia con diez, luego con veinte;

El texto presenta una estructura circulas, ya que va repitiendo la idea principal constantemente. A su vez podemos dividirlo internamente en 4 partes:
-la primera parte se extiende desde la línea 1 hasta la palabra Nada en la línea 16. Se nombran las costumbres existentes en el pueblo, las mujeres van a misa y los hombres al casino, mientras el pueblo se enriquece de la venta del vino.
-la segunda parte desde la línea 16 hasta la frase 'extraños a todos' en la línea 24. La pobreza se ha generalizado en Alcolea pero todos la aceptan sin hacer nada por recuperarse y sin relacionarse apenas con sus vecinos ya que entre los habitantes del pueblo se ven unos a otros como extraños.
-la tercera parte desde la línea 25 hasta 'difícil era averiguarlo' en la línea 32 Hurtado percibía el pueblo como un estado de sitio, no sabía que hacía la gente todo era una rutina constante y repetitiva donde cada cosa estaba siempre ocupando su lugar.
la cuarta parte, de la línea 32 al final.

jueves, 12 de abril de 2012

SE QUERÍAN - VICENTE ALEXAINDRE


Se querían.
Sufrían por la luz, labios azules en la madrugada,
labios saliendo de la noche dura,
labios partidos, sangre, ¿sangre dónde?
Se querían en un lecho navío, mitad noche, mitad luz.
Se querían como las flores a las espinas hondas,
a esa amorosa gema del amarillo nuevo,
cuando los rostros giran melancólicamente,
giralunas que brillan recibiendo aquel beso.
Se querían de noche, cuando los perros hondos
laten bajo la tierra y los valles se estiran
como lomos arcaicos que se sienten repasados:
caricia, seda, mano, luna que llega y toca.
Se querían de amor entre la madrugada,
entre las duras piedras cerradas de la noche,
duras como los cuerpos helados por las horas,
duras como los besos de diente a diente solo.
Se querían de día, playa que va creciendo,
ondas que por los pies acarician los muslos,
cuerpos que se levantan de la tierra y flotando...
Se querían de día, sobre el mar, bajo el cielo.
Mediodía perfecto, se querían tan íntimos,
mar altísimo y joven, intimidad extensa,
soledad de lo vivo, horizontes remotos
ligados como cuerpos en soledad cantando.
Amando. Se querían como la luna lúcida,
como ese mar redondo que se aplica a ese rostro,
dulce eclipse de agua, mejilla oscurecida,
donde los peces rojos van y vienen sin música.
Día, noche, ponientes, madrugadas, espacios,
ondas nuevas, antiguas, fugitivas, perpetuas,
mar o tierra, navío, lecho, pluma, cristal,
metal, música, labio, silencio, vegetal,
mundo, quietud, su forma. Se querían, sabedlo.

El texto presenta una estructura circular, ya que la tesis aparece por todo el poema, predominando además la enumeración.
Podemos dividirlo en 2 partes:
-la primera parte se extiende del verso 1 al 29. Los amantes están conociendo la naturaleza del universo perfeccionándola con su amor.
-la segunda parte está compuesta desde el verso 30 al final. El amor ha echo conectar a la pareja con el universo llegando a conocerlo.

El tema del poema es que los amantes se querían de forma total, de todas las formas.

Es un poema de Vicente Alexaindre, poeta de la generación del 27, donde  el autor describe el amor de 2  jóvenes. Se unen en su lecho de amor perdiendose entre besos y caricias bajo la luz de la luna, queriéndose en todo momento de día y de noche pero sufren cuando llega la luz del día porque es el momento en el que se separan.

Vicente Alexaindre es uno de los grandes poetas de la Generación del 27, aunque sean Federico García Lorca y Rafael Alberti los más recordados  y famosos entre la gente. Después de la Guerra Civil no se exilia, a pesar de sus ideas izquierdistas, permanece en España y se convierte en uno de los maestros de los jóvenes poetas. Murió el 13 de diciembre de 1984. A lo largo de su vida ocultó su homosexualidad. Por ello quizá expresa en el poema que los amantes son más felices por la noche cuando no pueden ser vistos de noche. En el poema encontramos diferentes simbolos: sufrían por la luz, es decir por el conocimiento de las cosas; labios llegando al amanecer y los labios azules hacen referencia a que han permanecido juntos la noche entera y adopta ese color al llegar la madrugada; lecho navío, un lecho que navega con un movimiento armónico, símbolo del subsconciente, el lecho que les obliga a navegar por el cuerpo del otro, amándose durante la noche y durante el día; rosa y espina, el dolor del amor; gema, la piedra preciosa, el sol; giraluna, igual que el girasol se orienta al solpara vivir los amantes se se orientan alrededor de la luna para encontrarse el uno al otro; los perros hondos en la noche, el lomo del perro o el gato cuando le acarician hace referncia al placer; besos diente a diente, más allá de la muerte. El autor finaliza con unas palabras correspondientes a esas cosas que nos hacen sentirnos bien.

miércoles, 11 de abril de 2012

TE QUIERO-LUIS CERNUDA

Te quiero.
Te lo he dicho con el viento,
jugueteando como animalillo en la arena
o iracundo como órgano impetuoso;
Te lo he dicho con el sol,
que dora desnudos cuerpos juveniles
y sonríe en todas las cosas inocentes;
Te lo he dicho con las nubes,
frentes melancólicas que sostienen el cielo,
tristezas fugitivas;
Te lo he dicho con las plantas,
leves criaturas transparentes
que se cubren de rubor repentino;
Te lo he dicho con el agua,
vida luminosa que vela un fondo de sombra;
te lo he dicho con el miedo,
te lo he dicho con la alegría,
con el hastío, con las terribles palabras.
Pero así no me basta:
más allá de la vida,
quiero decírtelo con la muerte;
más allá del amor,
quiero decírtelo con el olvido.




Luis Cernuda Bidón (Sevilla, 21 de septiembre de 1902 – México, D.F., 5 de noviembre de 1963) fue un destacado poeta y crítico literario español, miembro de la llamada Generación del 27. En la evolución de las obras de Luis Cernuda podemos diferenciar 4 momentos diferenciados por los temas principales en los que se basa:
- Adolescencia, aprendizaje poético y maestría
- Juventud, blasfemia, rebeldía, pasión y amor al amor
- Madurez, contemplación de los poderes terrestres y meditación sobre las obras humanas
- Límite con la vejez, mirada precisa y reflexiva
Este texto pertenece a la obra Los placeres prohibidos (1931), que incluiríamos en el segundo momento del autor

lunes, 2 de abril de 2012

RAFAEL ALBERTI- NOCTURNO

Cuando tanto se sufre sin sueño y por la sangre
se escucha que transita solamente la rabia,
que en los tuétanos tiembla despabilado el odio
y en las médulas arde continua la venganza,
las palabras entonces no sirven: son palabras.
     Balas. Balas.
     Manifiestos, artículos, comentarios, discursos,
humaredas perdidas, neblinas estampadas.
¡qué dolor de papeles que ha de barrer el viento,
qué tristeza de tinta que ha de borrar el agua!
     Balas. Balas.
Ahora sufro lo pobre, lo mezquino, lo triste,
lo desgraciado y muerto que tiene una garganta
cuando desde el abismo de su idioma quisiera
gritar lo que no puede por imposible, y calla.
     Balas. Balas.
Siento esta noche heridas de muerte las palabras.

1-Señale la organización de las ideas del texto.
2-Indique el tema y escriba un resumen del texto.
3-Comentario crítico sobre el contenido del texto.



1-El texto presenta una estructura inductiva dónde hay una gradación y una historia ya que aparece una introducción, un nudo y un desenlace, la tesis fundamental se expone claramente en el último verso 'siento esta noche heridas de muerte las palabras. Podemos dividir el texto en 4 partes:
- la primera correspondiente al primer párrafo, es una introducción donde habla sobre la venganza y y los sentimientos de rabia y sufrimiento haciendo una correlación de palabras en los sentimientos de dolor, como se expresa en forma de palabras que hacen daño.
- en la segunda parte aparece una enumeración caótica de palabras han hecho mucho daño y para que desaparezca tendrían que borrarse con el viento y el agua. Es un lamento porque todo por lo que se ha luchado y lo que se ha hecho ha sido inútil y la consecuencia de esta guerra es el humo, es decir, nada.
-la tercera parte el autor habla en primera persona y resume los anteriores fragmentos, se queja y por último cuenta el daño que le están haciendo esas palabras.


2- El tema es las palabras que hacen daño, como balas.


Al poeta le resulta imposible expresar lo que desea mediante las palabras, cuando estas palabras a veces hacen daño por sí solas y es difícil de olvidarlas.


3- Rafael Alberti, el autor del texto, fue un escritor español, conocido especialmente por su poesía, perteneciente a la Generación del 27. En este texto, el poeta se centra en el daño que pueden ocasionar las palabras, palabras que a veces decimos sin pensar. Cuando algo nos hace daño a veces reaccionamos haciendo daño a las personas que nos lo ha hecho o incluso a la gente que nos intenta apoyar sin pararnos a pensar lo que estamos haciendo. Podemos ocasionar mucho daño con las palabras e incluso hacernos daño a nosotros mismos, tal vez, por algo malo que haya pasado tendemos a generalizar y pensar que siempre va a suceder lo mismo y cuando perdemos algo, entonces, es cuando nos damos cuenta que no todo era malo, y que también había cosas buenas con las que éramos felices.